Diego Maradona: El Cristo de los Nadies

El Cristo de los Nadies nacio en el barro y nunca lo olvido. Jugando entre la tierra, con los pies descalzos mareo la pelota que fue una parte de su cuerpo. Todo fue magia y milagro. El pibe de Villa Fiorito que soñaba jugar en la seleccion, el que gambeteaba hasta ayer todo lo que se le ponia adelante, como si fuera la pobreza, y a medida que avanzaba sobre cada hombre y cada cosa, iba derribando una a una todas esas cosas que eran imposibles. Y se metia en los ojos del mundo, los hacia estallar, como si la alegria fuera posible a pesar de todo. Él ya no esta.
Fue mucho mas que el gol con la mano a los ingleses y el otro, el del barrilete cosmico. Fue la gambeta, el milagro de derribar lo imposible. Lograr desde Argentinos Juniors meterle cuatro goles a Boca, y llegar al Napoli para convertirse en Maradona.
Nunca fue el futbol. Fue el sur que por primera vez le ganaba al norte y lo humillaba. Ese sur oscuro, africano y pobre. Ese sur que imponia sus ojos oscuros sobre el norte rico y soberbio. Alla, aca y en todas partes.
Despues vivio como pudo. Pero estuvo con las Madres, las Abuelas, los Hijos, con ese sur que se unia por la Patria Grande. Tambien fue el lujo, el desborde, el dolor. Fue todos los hijos que ignoro y despues reconocio.
Maradona nos dio alegria y no habria que pedirle nada mas. O si: tal vez, que resucite.