Al fin, gano Leeds: el equipo de Bielsa supero a Newcastle con un dato asombroso
Un triunfo imprescindible, casi como el oxigeno. Leeds es una moneda al aire: cualquier cosa puede suceder con el equipo que conduce Marcelo Bielsa, ingenuo y atrevido, en partes iguales. Tres derrotas en serie, entre la Premier League y una dura eliminacion en una copa domestica, reabrieron las dudas acerca de la real capacidad del entrenador que suele despertar amores y odios. Al fin, volvio a ganar. Un duro, aspero 2 a 1 sobre Newcastle, como visitante, con un sello sorprendente: se apoyo en el rigor defensivo y en las manos de su joven arquero, Illan Meslier.
Bielsa: “Necesitabamos ganar”
A veces, los datos respaldan a los argumentos. Si bien Leeds se respaldo en la posesion del balon (58 por ciento), como en la mayoria de los partidos, su influencia fue relativa, ya que Newcastle dispuso de 22 remates (a la mayoria, esteriles y desviados) contra apenas ocho del equipo ganador, aferrado al musculo en los ultimos instantes.
El 1 a 0 de Leeds
Durante los primeros minutos, Leeds fue el claro dueño de la posesion de la pelota. Durante ese tramo, esa tenencia fue trasladada a la apertura el marcador. Una gran recuperacion en el medio campo termino con la pelota en los pies de Patrick Bamford. El delantero traslado el balon hacia adelante y abrio un pase hacia la derecha, a traves de Rodrigo Moreno. El español puso un freno adentro del area y vio ingresar en soledad a Raphinha, que se acomodo y definio contra un palo. De este modo, el conjunto de Bielsa puso el 1 a 0 a los 17 minutos.
El espectaculo fue electrizante. Newcastle intento con demasiado esfuerzo, Leeds dispuso de varios contraataques para elevar el marcador. El equipo local encontro el 1-1 luego de aprovechar una mala salida del equipo que conduce el rosarino -un mal que se repite-, un par de toques para la definicion de Miguel Almiron, el paraguayo que brillo en Lanus. Al rato, Leeds se puso otra vez arriba, con un zurdazo de Harrison. Se sacaban chispas, verdaderamente. El gol era una amenaza en las dos fronteras: el conjunto local, por necesidad y el conjunto visitante, por la valentia que suelen demostrar las formaciones del Loco.