“Ayer me dijeron otra cosa”: la pulseada secreta entre los gobernadores y el presidente en pleno rebrote : Entretenimiento de Argentina
Si el ex presiente Raul Alfonsin mitifico la frase “les hable con el corazon, pero me respondieron con el bolsillo” por estas horas el actual mandatario, Alberto Fernandez, tuvo la suya. A los 24 gobernadores les hablo con las medidas sanitarias que le pedia su ministro de Salud, Gines Gonzalez Garcia, y sobre todo el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pero la respuesta fue con la economia.
El viernes el Presidente se dio cuenta, de una forma mas que publica, de que ninguno de los mandatarios provinciales de peso esta de acuerdo en hacer mas concesiones que restrinjan la actividad economica, salvo que haya un consenso como hubo en los albores de la pandemia o que la situacion sanitaria se vea mas desbordada.
“Ayer me dijeron una cosa y hoy se me dieron vuelta”, bramo durante todo el jueves Fernandez que veia, mientras transcurrian las horas, que mas gobernadores se negaban a aplicar el toque de queda sanitario que proponia Gonzalez Garcia, que por estas horas se encuentra preocupado y asustado por lo que puede ocurrir.
Las versiones de un posible nuevo confinamiento que comenzaron a circular con fuerza los ultimos quince dias salieron en su mayoria de la cartera sanitaria. La Casa Rosada, a los pocos dias de las primeras apariciones de esa informacion, se sumo a la espera de ver la reaccion en la sociedad. Nadie lo va a admitir en publico, pero lo cierto es que Fernandez busco que la idea poco a poco se fuera instalando.
En la Casa Rosada, como tambien en cada una de las administraciones provinciales, son conscientes de que no hay poder de Policia suficiente para controlar que todos los ciudadanos cumplan con las medidas sanitarias. Ni la Ciudad, que tiene la mayor cantidad de efectivos de politica por kilometro cuadrado, tiene el numero para hacerlo. “Solo se puede llegar por miedo o por responsabilidad. No hay otra forma”, sostuvo uno de los funcionarios mas cercanos al jefe de Estado.
Sin embargo el resultado no fue el que esperaban. Una señal del descontento es que el propio Kicillof cancelo su conferencia de prensa, emitio un comunicado con las restricciones que tendrian para aplicar, o no, los intendentes y algunos de sus funcionarios mas cercanos fueron a explicar estas medidas a diferentes medios de comunicacion. Pero el mandatario provincial evito aparecer. Eso si, se encargaron de anticipar que las medidas comenzaran a regir el lunes, pero el martes habra mas anuncios. ¿El motivo? Los numeros de contagios siguen a la alza y es la ultima carta que le queda al gobernador bonaerense para dejar de lado la discusion politica y avanzar en las medidas sanitarias.
Habia enojo en la Provincia con el Ejecutivo nacional, cuya intencion primaria era que la disposicion saliera por decreto, pero que contara con el fuerte respaldo publico de los mandatarios provinciales; en especial aquellos cuyos distritos se encuentran mas complicados en terminos sanitarios. La “sugerencia” termino por darle mas poder a los intendentes de la Costa, en especial a Guillermo Montenegro y Martin Yeza, quienes insisten en que los desmadres que se vieron en las playas pueden “revertirse” solo apelando a una mayor responsabilidad individual.
Algo simular hizo el Presidente con el anuncio, similar en cuestion ya que ponia a consideracion de las provincias las medidas a tomar, de las restricciones que recomendaba que se apliquen.
Horas antes, Fernandez recibio la confirmacion por parte del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodriguez Larreta, y de los gobernadores de Mendoza y Cordoba, Rodolfo Suarez y Juan Schiaretti respectivamente, que no aplicarian restricciones a la circulacion y que la mayor concesion seria reducir el horario de la nocturnidad.
A ellos se la sumo uno de los aliados mas estrechos de Fernandez entre los gobernadores: el de Santa Fe, Omar Perotti. El modelo que aplico en la provincia para la restriccion de la circulacion a fines de noviembre fue ponderado como el “a seguir” por el Presidente.
Sin embargo, el gobernador no estaba dispuesto a endurecer aun mas la circulacion y prohibirla en esos horarios como pedia la Rosada. “Vamos a seguir como estamos”, fue la directiva que llego desde la capital provincial.
Este escenario dejo sin espacio a Fernandez, sino tambien a Kicillof. No obstante ello, de no bajar la cantidad de contagios y que el sistema sanitario se empiece a saturar, en la Casa Rosada tiene preparado, por si las dudas, el “te lo dije” para los mandatarios provinciales que se negaron a mayores restricciones. “Ellos, ahora, van a ser los responsables de lo que pase. Nosotros ya recomendamos”, remarcan.
Fuente: argentina.pitirre.info